Los instrumentos de cuerda tienen algo especial y las mujeres que los tocan más...
La música calma a las fieras, ayuda a relajar, a excitar, a mejorar la capacidad intelectual y en numerosas ocasiones ayuda incluso a unir parejas. Todo el mundo tiene una canción que le recuerda algo especial o al escuchar ciertas melodías se recuerdan conversaciones o situaciones hermosas.
La guitarra es un instrumento especial, forma de mujer,madera y cuerdas que emiten sonidos que resuenan en su caja provocando melodías a veces imposibles.
Siempre que voy a trabajar, en la misma calle, en la misma esquina y a la misma hora, todos los días una bella muchacha toca su guitarra, canta canciones de amor, unas conocidas y otras compuestas por ella misma. Los sonidos de esa guitarra parecen transportarnos a todos los que pasamos por allí a lugares mejores donde el amor es el mayor gobernante y los besos el salario de cada mes.
En algún momento le dí alguna moneda a esta música callejera y de vez en cuando un cigarro de mi paquete de veinte. Me gustaba escuchar su voz, si no estaba incluso la notaba en falta y buscaba la funda de su instrumento en el suelo continuando mi camino hacia mi jornada laboral.
Una noche, una pareja de amigas mías tuvieron una fuerte discusión decidiendo no volver a hablarse si quiera. Ambas mujeres lloraban y me contaban por separado que se amaban y que no sabían que hacer, se arrepentían de tamaña decisión y su corazón estaba encogido por el dolor y la tristeza.
No podía evita estar triste, una mañana la chica de la guitarra, se acerco a mi preguntándome sorprendentemente que sucedía. La invite a un café y le conté la pena que sentía por mis dos amigas. La muchacha de la guitarra se hizo cargo “por las monedas” y durante unos días nada supe ni de mis amigas ni de la guitarrista.
A la semana siguiente la joven pareja ya estaba junta gracias a la guitarra.
La muchacha de la esquina, era un ser mágico. Regalaba amor con su guitarra y buscaba desde su posición personas a las que ayudar, las cuerdas cuando vibraban emitían sentimientos y magia. El poder de esta fantástica mujer residía en regalar amor y evitar que parejas realmente enamoradas se separasen para siempre.
Esta chica tomaba múltiples formas para acercarse sobre todo a las parejas de chicas repartiendo melodías como si de una tuna entera se tratase.
El amor no sabe de orgullo, el amor no sabe de engaños. Si alguna vez la soledad o el enfado toman tu alma, recuerda, la música de una guitarra puede recuperar tus sentidos e infundir felicidad.
2 comentarios:
la melodía que mencionas, que une parejas, para mí es la mirada. la mirada que me enamoró cierto día de verano en una cafetería cualquiera de no importa qué lugar. desde entonces cuando me siento triste recuerdo aquella mirada y viajo en el tiempo...
Como lesbiana feminista venezolana, y profesora de la universidad del zulia en estudios de género lésbico, me encanta esta web¡¡¡ elida aponte sanchez
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